En la primavera de 1992 recibí la llamada de
El Jueves indicándome que iban a sacar una revista titulada
Puta Mili, con la que se quería aprovechar el tirón de las historietas de igual nombre que venía publicando
Ivá en aquellas fechas. Me fue asignada una historieta semanal a color directo (manual) con el tema de la Legión, el más espinoso (eso por vivir fuera y no poder protestar), pero que en el fondo, a la larga me alegraría de ello por ser el más original frente a otros motivos cuarteleros. Así que ni corto ni perezoso, ahí me tienen ustedes buscando documentación: que si uniformes, ropas morunas, dromedarios, dunas, jaimas, alfanjes, mosquetones, espingardas, y ¡cabras de todos los tipos!. El propio director del semanario me mandó los himnos de la Legión, ¿qué pasa? -le dije- ¿tengo que cantarlos? y desde entonces, las cosas fueron cuesta abajo.
Las historieta tendría diversos pragonistas. Aquí les reproduzco algunos de los primeros bocetos para un posible soldado
Sinceramente, la nariz a pesar de ser muy grande, e incluso el cuerpo y las botas, no parecían muy míos, por lo que diseñé otros modelos, eligiendo entre algunos más estos tres que casi serían definitivos:
El Gabacho, desertor del ejército francés en tierras de África, más
el Cabo Primero Prim y
el Soldado Castillejos, nombres los dos que puse de las antiguas andanzas hispanas por Marruecos.
Al fin, un día de julio de 1994, salía a la calle
Puta Mili y con ella, esta historieta inicial de
El Quinto Tercio que reproduzco de aquel primer número. Y a ella le seguirían 157 más durante tres años. Tiempo habrá para mostrar algunas otras. (Picar en la página para ampliarla)
Fué la serie más original que se publicó en aquel semanario.
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